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El Juez

Una luz de colores inexplicables me envolvió, pero…. aunque era extraño me sentía seguro, era raro sentir una protección en lo desconocido, a mis 28 años de vida nunca había sentido algo como esto.

Observé con mucho cuidado y mientras mis ojos, se adaptaban a esta nueva luz empecé a percibir un olor agradable como una mezcla de frutas a campo a familia y de pronto una nueva realidad estaba frente a mí.

Froté mis ojos y volví a observar, mi cuerpo y mi mente eran los míos no habían cambiado, cerca de mí una cuna, camine hasta ella, allí había un bebe, estaba despierto, incline mi cuerpo y lo observe detenidamente; una voz me dijo que lo levantara, inmediatamente sentí una conexión especial con él, lo mire sus ojos, su rostro, su piel, y sentí como latía su corazón, fue un momento maravilloso y entonces una voz dijo ese al que alzas eres tú mismo a la edad de seis meses, no puedo explicar con palabras esta oportunidad de observarme de bebe y entender el milagro de la vida en mí, sentí que la lagrimas recorrían mi rostro, y mi corazón estaba a punto de estallar, y un sentimiento de agradecimiento con la vida con Dios, me salió del alma, gracias Señor por este “Equipaje para la vida” que me has dado, por este cuerpo, cuantos seres humanos nacen con complicaciones físicas o mentales, pero yo tuve la oportunidad de llegar sano, completamente bien, ni hablar de las personas que me cuidaron y a las cuales podía sentir a través de este pequeño ser, gracias mamá, por cuidarme nueve meses dentro de tu vientre, darme tu sangre y tu amor, gracias papa por darme la fuerza de la existencia.

Seguido a esto una suave luz azul tenue me invitaba a cruzar una puerta y a lo lejos vi, la figura de un niño de 8 años que saltando se acercaba a mí, jugaba, era feliz, al llegar cerca de mí, se detuvo me miro directo a los ojos y esta vez comprendí que él era “YO MISMO”, se me acerco sonrió tomo mis manos y sentí el olor de la verdad, la fe, el amor, si, esos sentimientos que solo en los niños son puros transparentes e inmensamente totales. Estaba rendido frente a él y supe que no podía ocultarle nada, ¿y cómo? ……Si era yo mismo.

No sé, no recuerdo si abrí mis labios, pero le pregunté, ¿Te sientes orgulloso de mí? ,Hoy se, que respondió su corazón, o mejor dicho el mío, el de él, el del universo; sentí que mis manos se querían soltar de él, pero él, sin el mínimo esfuerzo me anclaba y entonces abrió su boca y dijo – No ,no estoy orgulloso de ti, te has equivocado y te olvidaste de nuestro proyecto de vida, ¿recuerdas? cuando eras niño querías ser y hacer lo mejor con tu vida pero lo olvidaste, te dejaste moldear por la sociedad liquidad que te forma a su gusto para no dejarte cumplir tus propios sueños y te olvidaste de MI……acto seguido soltó mis manos lentamente y entonces mi cuerpo empezó a caer en una calidad luz azul, grite, llore, me dolía el alma.

Recuerdo la mano de mi madre recorriendo mis cabellos y su cara de felicidad y asombro, al ver que mis ojos se abrían, beso mi frente y susurro a mi oído. “Bienvenido a casa ángel de mi corazón” y fue entonces cuando comprendí por qué él no estaba orgulloso de mí; yo estaba en un hospital, con mi cuerpo paralizado de la cintura hacia abajo, 21 días atrás había tenido un accidente automovilístico y quedé en estado de coma, estaba esa noche bajo el efecto de las drogas lastimosamente, había empezado a usar drogas desde los 13 años, por cerrar mis oídos a los concejos de la vida, ¿porque fui tan ciego?

Hoy atado a esta silla de ruedas, recuerdo a ese niño que corriendo y saltando se acercó a mí en ese hermoso sueño y toco mi corazón y me soltó suavemente a la nada y me dejo volver a la vida, ¡Sí! y ya se para que, para aprender mi lección, para aprender a valorar esta vida, este cuerpo, esta oportunidad de respirar y para darle gracias al cielo porque no olvido ponerme nada.

“Recuerdo una frase de mi padre que siempre uso, pero la cual comprendí, muy tarde hijo:

En La Vida Y En La Muerte No Hay Peor Juez Que Uno Mismo” ...

FRANKLIN ALEXANDRO JEREZ LARROTA

EQUIPO JUVENIL

DORIMH 2019